jueves, 13 de septiembre de 2012

A très bientôt

Ningún recorrido por Francia se completa sin descubrir por alguna de sus calle los clásicos Citroën, símbolo automovilístico del país.

Además, siempre encuentras alguna imagen que traiga -que me traiga- recuerdos del colegio, cuando en clase de francés (antes algunos colegios religiosos no impartían ingles) cantábamos canciones populares:
J'ai du bon tabac dans ma tabatière
J'ai du bon tabac, tu n'en auras pas

J'en ai du fin et du bien râpé
Mais ce n'est pas pour ton vilain nez

J'ai du bon tabac dans ma tabatière
J'ai du bon tabac, tu n'en auras pas
Junto al “Hotel de Ville” y la catedral de Burdeos, cada mañana de domingo es fácil encontrar en la plaza puestos de zumos, vinos y bollería casera así como frutas y verduras frescas que venden los propios agricultores. En esta moderna ciudad, con una red de tranvías y peatonalización del centro,  se cuida lo tradicional y el uso de la bicicleta es muy popular.




Me pregunto si Antolín, el fundador de esa marca de helados, no tendría similar  procedencia que Luis Ortiz, el pasiego de San Pedro del Romeral, que fundó en la misma época (principios del siglo XX) los helados “Miko”. 
Claro que, pese su apellido, a la profesora de danza  su nombre la delata como oriunda del lugar.


Es evidente el origen de El Maño y descubro que también está muy presente en la memoria su dramático final.

Mientras, la vida continúa y éste viajero, paso a paso, intenta captar instantes de la vida cotidiana y de sus gentes…



…aunque algunos, para leer un rato, se escondan en incómodas armaduras medievales o se tumben plácidamente en el césped.


Pero al final, como siempre, hay que seguir las indicaciones y regresar, el viaje finaliza y hay que volver a la endemoniada rutina.
Gracias por acompañarme, post a post, durante ésta breve visita por Francia.

A très bientôt sur Paso a Paso.
                                            Francia, septiembre de 2012

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