El buen tiempo que aún perdura bien entrado el otoño anima a mucha gente a aprovechar las jornadas haciendo rutas por las montañas. En los Collados del Asón fue tanta la afluencia que se llenaron los aparcamientos y los últimos en llegar tuvieron que aparcar en la carretera. Antes de iniciar la ruta todo apuntaba que nos encontraríamos un gentío, pero nada más lejos de la realidad, estuvimos solos toda la ascensión a Los Campanarios y solamente nos cruzamos con tres parejas compartiendo la ruta de descenso. Afortunadamente, las aglomeraciones solo ocurren en algunos lugares más populares, en rutas hiper balizadas y señalizadas o que cuentan con mas track en las aplicaciones. Así que, felizmente para nosotros, se armonizaron en el mismo día una temperatura ideal, un cielo azul impresionante, el bosque mudando a otoño y una preciosa ruta no pateada por un terreno espectacular donde apreciar los desniveles y el magnífico paisaje característico de la zona.
Fotografías realizada el 11 de octubre de 2025














