Si las sierras del Cordel y de Peña Labra no se taparan de
blanco cada invierno, poco fluiría el manantial de Fontibre. Si, además, el
Hijar no encauzara otras aguas de los altos, Iberia tendría otro nombre porque
no habría río que la bautizara.
Y es que, toda la comarca alta de Campoo recoge agua para alimentar arroyos y fuentes. Hasta el Serbal de los Cazadores le roba gotas a las nubes cuando bajan hasta el suelo.
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Serbal de los Cazadores |
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Hoyo Sacro |
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Río Hijar |
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Cascadas de Los Cirezos |
No es extraño que el espectacular paraje
de Hoyo Sacro sirva de cuenco donde se recogen regueros, deshielos y
chorretones para guiarlos valle abajo y encauzarlos entre bosque, brezales y
retamas. Así, por las gradas de Los Cirezos , cascada tras cascada, el agua
baja ya hecho cauce y hasta con nombre propio: Hijar, un afluente insigne del
Ebro, responsable que desde el Pico Tres
Mares parte de sus nieves lleguen al Mediterráneo. Y es que, caminando los
rincones campurrianos, uno descubre las innumerables fuentes del Ebro.
Claro que tanto agua y las bonancibles temperaturas de ésta
época hacen que se muestre exuberante la flora y revivan del letargo invernal
hasta los seres más pequeños del lugar.
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Fotografías realizadas el 14 de julio de 2012 |
Qué maravilla! Precioso el recorrido en imágenes. Gracias, así nos lo perdimos un poco "ménos"...
ResponderEliminarÁngel